Sombras del Este

Ya está puesto el despertador, menos de dos semanas y ya despertaré. Pero el idilio no se acaba, no puede hacerlo. Es lo que tienen los locos, su cuerpo puede estar en un sitio y su mente en otro. Mi caso es mas particular. Gracias a vosotros siempre me he mantenido pisando esa delgada linea de "otro tono de morado", que separa la coherencia de la locura, esa linea que pasará a convertirse en un Hola y un Hasta Luego.
Apenas queda tiempo para volver a Mordor, con esos Orcos que espero que me demuestren que en mis tiempos de ausencia han aprendido otra cosa que no sea coger aceitunas y mirar al mochuelo en el Olivo.
Al abrir la carta, los recuerdos se han agolpado tras la retina y el único lamento tras tanto tiempo ha sido el no haberme llevado un paquete de pañuelos. Tendré que volver a releerlo todo ya que la mitad de las letras me han parecido borrosas.
No es otra etapa. No hay "ruptura cultural", lo único que hay es continuismo, y si me tengo que ir a cagar al cerro de enfrente (como decía Paco Pepe) para encontrar al indígena, que no os quepa duda. ¡Lo haré!
Y es que, las palabras son tan fáciles de pronunciar, enuncian la verdad o engañan. Embaucan o convencen, apuñalan o besan y por desgracia a corto plazo nunca sabes de que tipo son. Sin embargo los hechos siempre son verídicos, siempre son verificables. Y nosotros a lo largo de los años, nos hemos basado en los hechos.

No se que más decir, la verdad. Solo dar la gracias por el detalle, me ha hecho muchísima ilusión.

" Y si la fortuna o el azar me dan la oportunidad, de volvernos a ver..."



Si las personas somos la suma de lo que la gente dice de nosotros, puedo darme por satisfecho al leer vuestras dulces palabras.



http://www.youtube.com/watch?v=X20Wtj23vWw