No es una huelga, es una estrategia militar.

Huelga de barrenderos en Sevilla, otra mas...

Con ella he llegado a una conclusión que creo que muchos compartirán. Si quieres que tus peticiones sean escuchadas y haces huelga mas vale que seas barrendero, puesto que parecer ser el único colectivo al que se escucha cuando protesta.

Que la lucha de este tipo de trabajadores sea dejar que las calles se llenen libremente de basuras me parece que debería incluso clasificarse como delito contra la salud pública, no es normal que se puedan ver a las ratas correteando por nuestras calles y degustando sus manjares delante de los colegios donde niños sin culpa ninguna salen o entran a las aulas.

Cuando otros colectivos hacen huelga en sus respectivos sectores es cierto que causan grandes traumas al ciudadano, al igual que ocurrio con los médicos (¿esto sería tambien delito contra la salud pública?), pero sin embargo a diferencia de los médicos a los barrenderos se les hace caso, la resistencia de los ayuntamientos no suele pasar de los 15 días.

Baste decir que algunas de las condiciones que propone el consistorio de Sevilla son cuanto menos dolorosas para las familias de los trabajadores afectados, así tambien como para ellos mismos y que de igual modo que antes hablé de delito contra la salud pública, muchas de las actuaciones de nuestros """queridos""" políticos deberían ser juzgadas como delitos contra la humanidad.

Entre otras cosas se habla de que se les reducirá el sueldo un 5% con los salarios congelados desde hace 5 años. Curiosa la reivindicación cuando muchos cuerpos de funcionarios del Estado tienen el sueldo congelado o con subidas inferiores al IPC desde la época de Felipe Gonzalez, pero si ellos se quejan es absurdo, puesto qeu son funcionarios y por lo tanto unos claros privilegiados del sistema.

Si la definición de privilegiado la dieran los políticos estaría claro quienes serían los privilegiados. Hagamos una breve lista: "Autónomos, profesores, funcionarios, médicos, controladores aereos..." aquí nos detenemos puesto que la lista sería interminable, al parecer todos los trabajadores de este país son unos privilegiados. Lo malo es que nos lo hemos acabado creyendo, acabaremos pensando que el trabajo es un privilegio y no un derecho. Mientras ellos siguen mirando a la cámara y con una mirada de piedra y unas gafas de oro, nos miran a la cara y nos mienten.

Las cosas depende de como se enfoquen, depende de como queramos verlas, esa es la realidad. De este modo voy a preferir ver la huelga de basuras de mi Sevilla no como una Huelga de Basuras, mas bien como una estrategia militar, en el que por unas vez, todos los ""privilegiados"" de la sociedad nos unimos contra esos pobres servidores de la virtud pública a los que llamamos políticos. Los barrenderos nos dejan la munición en las calles y el día que esto estalle de verdad solo tendremos que colocar esa basura en el lugar que correspond,e sobre los políticos.