Se afanan en convencernos de sus pensamientos, de sus creencias, nos martillean constantemente sobre las necesidades del Etado. Provocan el miedo a una situación desconocida, emiten informes donde se habla de catástrofe. Mañana dicen que es el fin del mundo y lo único que me hace pensar que efectivamente así es, es la clase política.
Te sientas frente al televisor y te encuetras con personas que no han visto la miseria de cerca, que no saben lo que vale el esfuerzo y que nunca han sentido una lagrima ajena caer por su mejilla.
Por suerte, habita en ciertas personas un sentimiento que va mucho mas allá de los números y de los informes. Por suerte, aun hay personas que se enternecen con la miseria, que hacen del dolor ajeno el suyo propio. Por suerte existe Toñi Moreno, uno de mis amores platónicos.
Por primera vez en mucho tiempo he tenido tiempo para sentarme frente al televisor, no ha sido mas de 20 minutos, pero en esos 20 minutos he tenido que llorar varias veces. Elegí ver un programa de Canal Sur denominado "Tiene arreglo", sin lugar a dudas el nombre hace justicia a la labor que viene desempeñando el programa, uno de los mas bellos y necesarios que he visto en mi vida y que tal vez nunca tenga el reconocimiento que debería, pues para ello deberían demoler la estatua de San Fernando en Sevilla y poner la de Toñi.
El programa no es mas que un nexo de union entre dos nodos, por un lado la figura de una persona necesitada y por otro personas que están dispuestas a dar lo poco que tienen para hacer mas llevadera la vida a gente que no conocen y que jamás conocerán.
La situación que he visto hoy era la siguiente. Un matrimonio de unos 40 años, con dos hijos de 11 y 13 años. Esta familia de Sevilla llevaba meses sin recibir ninguna ayuda pública. El cabeza de familia había trabajado en todo lo que había podido durante años, de pocero, limpiando aguas fecales, lo que se pudiera con tal de tener un plato que darle de comer a sus niños, cualquier cosa por una sonrisa. Sin embargo fue despedido, terminó su prestación y ahora no tienen nada. Les han cortado la luz, el agua. Han tenido que hacer un puente ilegal para poder recibir un mínimo de luz con el que cocinar.
Al instante como si de un resorte se tratase comenzó a llamar gente para ayudar. El primero de ellos un señor de 69 años que decidio dar 300 € y llenarle el frigorífico, era pensionista y estaba dando la mitad de su paga. Seguidamente llamó una mujer de Murcia, ofreciendo 100 € al mes durante 6 meses, además de 300 € de golpe, era otra pensionista. Posteriormente se levantó una persona del público y volvio a ofrecer 300 €. Tras eso llamó otra señora, tambien pensionista, que llevaba ahorrando dinero durante bastante tiempo para poder hacerle un regalo de comunion a dos de sus nietas, sin embargo pensó que esta familia lo necesitaba mas y tambien le entregó el dinero íntegro. Como dije antes no hay mejor regalo que el de una sonrisa, aunque no conozcas a la persona.
Mis lágrimas fueron las de Toñi y las de Toñi las mias. No sabía si alegrarme por la buena voluntad del que mas tiene o llorar aun mas por haber llegado a este punto de necesidad. En segundo plano aparecía el matrimonio que estaba recibiendo las ayudas y los pobres no paraban de llorar y de abrazarse. Se veía a la legua que entre ellos había algo que escasea en estos tiempos aun mas que el dinero, el cariño, el amor verdadero.
Pero entonces llegaron los anuncios y decidí cambiar de canal, en la sexta estaban con el programa de "Al rojo vivo" debatiendo sobre la independencia de Cataluña y del Estado opresor. Al comparar las dos caras de una misma moneda que es la crisis solo puedo decir lo siguiente.
Para Toñi todo mi cariño y mi aprecio, una mujer sincera, con una cara angélical que va regalando sonrisas a media Andalucía, una persona que sabe transmitir el pesar de los demás, que sabe hacerlo suyo y que está haciendo junto a todos los componentes del programa, así tambien junto a todos los que participan activamente llamando por teléfono, algo que deberían hacer las instituciones que es aligerar el peso de la crisis de los hombros de los ciudadanos .
Por otro lado, a esa escoria que brota a borbotones de la sociedad, a esa clase política que fagocita los recursos y los regurgita sobre empresas privadas para que se alimenten y acaben con todo lo bueno que tenía el sistema público. A esos carroñeros que se aprovechan de los más débiles, que los engañan desde el desconocimiento y que los manipulan hasta límites insospechables, aludiendo al hambre, a la miseria, a la salud y a la educación, cuando ellos nunca han sentido en su nuca el aliento de la necesidad, os deseo sinceramente que llegue el día en el que tengais que pedir para comer, en el que tengais que rogar para una operación, os deseo algo que estais consiguiendo día tras día, el desprecio de toda la sociedad.
Y recordad que por muy mal que estemos, todo tiene arreglo. Que lástima que eso que aparece en la Constitución y en la Ley General de la Seguridad Social que los altos mandatarios de esta país llaman Justicia redistributiva lo tenga que hacer este angel caido en San lucar de Barrameda en lugar de quien debiera hacerlo.
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