Días grises pero...

Hoy es uno de esos días grises, en los que miras hacia el cielo y no se ve ni una esquirla de sol. Pero es incluso en esos días en los que parece que nada te puede alegrar cuando lo más pequeño te puede dar una alegría.

Lanzándole alguna que otra mirada fugaz al huerto me encontré con que uno de las plantas de guistantes tenía unas hojas un poco pálidas, en principio no le di demasiada importancia, despues pensé lo peor, que le había entrado otro hongo al igual que me había pasado anteriormente con los calabacines. Pero nada mas lejos de la realidad. Lo que tenía era la primera flor de los guisantes. La inexperiencia da muchas desilusiones, pero tambien da grandes alegrías cuando te encuentras con este tipo de cosas, tan bellas, tan simples y tan gratificantes.

Saludos.