Vistas de página en total

domingo, 9 de diciembre de 2012

Cuando el mundo se caiga yo me iré corriendo

Aquí estoy de nuevo, han pasado pocos días desde que anuncie un cierre provisional. Pero soy un pésimo juglar, falto a mis promesas, en este caso de forma positiva, al menos para mi autoestima.

Será debido a que en los últimos tiempos no ha habido una sonrisa perenne escondida en mis sueños, ni abrazos ni consuelos en la despensa. No quiero ser una de esas personas que se muere en el mismo momento en el que se ha acostumbrado a no comer y por eso aquí he vuelto.

Volveré poco a poco a retomar el ritmo de una entrada al día, unos días serán con mas acierto que otros y entre otras cosas voy a tratar de dejar a un lado la política, economía y esas cosas para centrarme mas en otros paradigmas y si eso contribuye a sacarle una sonrisa a alguien pues perfecto. De cualquier modo no quiero dejar esto atrás.

Supongo tambien que a pesar de que pienso que podré escbribir diariamente ahora empieza una época bastante complicada para mi, trabajo sin parar (cosa bastante buena) a la que se le unen las oposiciones mas otra serie de cosas que siempre contribuyen a robarme un poco de tiempo de ocio.

En ocasiones pienso que exagero en mi sentido de la responsabilidad y que eso despues me cuesta mas de un disgusto puesto que a pesar de que ayudas a ciertas personas provoca ciertas colisiones con otras que buscan disfrutar del ocio que no tienes contigo.

Si pudiera pedir un deseo sería no necesitar dormir o que el día durara 48 horas.

Un abrazo a todos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario