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miércoles, 7 de noviembre de 2012

Madrid Arena. El truco del almendruco.

Este es sin lugar a dudas uno de los mas claros ejemplos de como aquel que ostenta el poder en un momento determinado puede y de hecho lo hace, engarñarnos con toda la facilidad del mundo.

Escuche una vez una de las leyes de Murphy que dice, "burocratizar hasta llegar al nivel de incompetencia para entonces burocratizar mas". Tal vez sea necesario releer la frase o incluso darle distintos enfoques para entenderla del todo, ya que tiene distintas interpretaciones, distintas aplicaciones y distintos matices.

En esta caso vamos a destacar entre todas esas situaciones, esa que nos da como solución final, una maraña legal en la cual pocas personas pueden desenvolverse con soltura y en al cual la mayoría de nosotros caemos como una polilla en una tela de araña. No sabemos desenvolvernos, no sabemos como hemos llegado ahí y mucho menos sabemos como salir. Nos quedamos por tanto a merced de la arañita de turno que puede engatusarnos con sus malas artes para hacer con nosotros lo que desee.

En el caso del Madrid Arena el entramado ha sido de tal magnitud que al tiempo que se lanza una acusación contra la Administración esta, personificada por ciertos cargos, sabe como escapar a las acusaciones. A continuación me limitaré a poner algunas de las acusaciones que he estado escuchadno en los últimos días y como la maraña legal ha logrado ir dilatando poco a poco la situación, de forma que pocas personas sabrán como se ha logrado que lo que allí sucedio tenga tintes de legalidad.

Para comenzar diremos que la primera acusación que se vertio contra al administración fue no tener el suficiente número de efectivos de policía en la puerta o que estos no controlasen la afluencia de personas.

Contra este argumento la contestación de cualquier ciudadano que no esté demente es sencilla. El conjunto de españoles no estamos para pagar los desmanes de unos pocos, no estamos para pagar las horas extraordinarias de la policía y mucho menos para que sus juergas impidan que se pueda acudir a otra situación de peligro. Sería por lo tanto la empresa la que debería de hacerse cargo de la seguridad dentro y fuera del recinto donde se celebra la actuación.

Seguidamente se habló de que el Vicealcalde es amigo personal del dueño de la empresa que alquiló el Madrid Arena. En este caso supogno que la defensa es facil ,por parte de este señor, que con decir sencillamente que es un conocido debido a los acuerdos que se llegan entre empresas y el ayuntamiento tiene las espaldas cubiertas. Es mas, a mi no me importaría que fuese amigo íntimo y comiese en su casa todas las noches si lo que voy a comentar a continuación no sucediese.

El gran problema creo que radica aquí, puesto que lo que comento a continuación es lo que ha provocado en última instnacia la crisis institucional de la que goza nuestro país, así como tambien ha podido ser causa directa de lo acontecido en la noche de Halloween en este recinto.

Resulta imposible para cualquier empresario la realización con las administraciones públicas de índole estatal, autonómica o local, de contratos sea del tipo que sea, siempre y cuando este empresario no esté al corriente de sus pagos con Hacienda y con la Seguridad Social. En este caso la empresa adeudaba mas de 20.000 € a la Seguridad Social.

Por lo tanto, ¿como pudo darse el alquiler?. De una forma muy sencilla. El Madrid Arena es en primer lugar propiedad del ayuntamiento de Madrid, siendo este considerado un ente público que forma parte de la administración con todos sus derechos y obligaciones. Sin embargo no será el Ayuntamiento el que alquile el Madrid Arena a la empresa. El alquiler lo efectuará una empresa PÚBLICA creada por el ayuntamiento de Madrid, con su propio funcionamiento interno. Entre las exigencias internas de esta empresa no está en ningún momento la necesidad de firmar contratos con empresas que estén al día de pagos con las administraciones. Sin embargo los beneficios del alquiler se revierten en el Ayuntamiento.

Por lo tanto se ha colocado una ley que impide este tipo de actos pero se pone una puerta trasera que además se queda abierta para que cualquier delincuente que venga con un buen fajo de billetes pueda entrar a sobornar a la criada y hacer lo que quiera. Además como ya hemos comentado se produce la inflación de la administración, con la creación de estas empresas públicas que al final sirven para lo que sirven, lo único que se consigue es desprestigiar a los Funcionarios, que no son precisamente los que tienen los sueldos mas altos ni los que hacen este tipo de actos.

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