De igual modo este trabajillo me ha servido para poder sacarme unos jugosos emonumentos que irán directos a un ahorro pensando en un futuro un poco mas halagueño. El trabajo navideño ha sido basicamente el mismo de todos los años pero aumentado en tiempo.
Basicamente ha constado de recogida de aceitunitas y por otro lado trabajo en una pastelería. Es quizás la primera vez en mi vida que he tenido la suerte de realizar un trabajo durante tantos días, algo que en estos días se agradece incluso mas. Es por ello que quiero compartir algunas fotos que he podido hacer durante el transcurso de estos días de labor, que a día de hoy continuan pero con menor intensidad.
En primer lugar como no podía ser de otro modo aquí teneis un rosconcito metido en su caja.
En este caso os presento alguna de las tartas que he tenido el placer de hacer y tambien de saborear.
A pesar de la mala pinta y mal enfoque son roscones de reyes. Metidos en el horno y la foto está hecha desde fuera del cristal. Aun no están cocidos por eso tienen esa tez iniestesca.
Cambiamos de tercio y nos vamos al campo. En este caso lejos de hacer una fotografía de los olivos y la aceituna colgando enfocando a los montes, que es lo típico. He decidido hacer una foto de cuando llegamos al campo, cuando aun es de noche y el aliento se congela. Podemos ver en esta imagen la luna, aun omnipresente entre los olivares.
En contraste con la foto anterior os dejo esta hoguerilla qeu tuvimos que hacer para entrar un poco en calor.
Espero que os gusten estas fotos que son malas por la mezcla de mala cámara y mal fotógrafo. Si alguien quiere regalarme una cámara mejor o un cursillo fotográfico no será rechazado.
Saludos.
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