En estos tiempos que corren cada día mas se busca el calor de un beso o la complicidad de un abrazo. Los días pasan y pesan y se necesita a alguien que esté a tu lado, o al menos lo parezca, para que te ayude a continuar.
Muchos buscan incesántemente esa persona que este a su lado, que les ayude a seguir hacia adelante. Existe, aunque pueda parecer raro, personas que encuentran a ese alguien o alguienes casi desde que comienzan a gatear, pero tal y como el refran dice "nacemos solos y morimos solos" pero el resto del tiempo no queremos pasarlo así, nos aferramos al primer calor que pase por la puerta, lo agarramos y no lo queremos soltar pase lo que pase.
Dentro de este gran grupo de personas está otro grupo que considero incluso mas desdichado, aquellos a los que alude o parece aludir el título de a entrada. Aquellas personas que a medida que avanzan van conociendo gente, pero siempre acaban sintiendose solas en el mejor de los casos, siendo el peor de ellos sentirse solo y encíma abandonado por la gente a la que le has entregado tu cariño. En ocasiones desaparecen por fallecimiento, siendo lo mas frecuente que lo hagan por encontrar algo que parece mejor.
Nos sentimos abandonados y nos dedicamos a preguntarnos en que hemos fallado, o porqué no nos quieren a su lado, o en ocasiones acabamos preguntando el motivo por el que no nos quieren en el mismo grado que los queremos a ellos.
Lo peor como decimos sucede cuando te abandonan y sientes un impulso dentro de tí a quedarte con la única persona que no puede abandonarte, que eres tu mismo. Los ojos se te acaban llenando de lágrimas con una sola frase en la mente "¿no te doy penilla?"
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